La estratificación térmica o efecto banana se produce en fluidos cuya densidad varía en función de la temperatura. Esto es multitud de procesos, incluyendo la industria petroquímica y las plantas termosolares.
En la generación termosolar, el aceite térmico puede sufrir variaciones de 0.65 a 1.05 veces la densidad del agua. En la puesta en frío de plantas de GNL, el gas y el GNL pueden encontrarse durante el llenado.
El efecto banana se produce cuando el calentamiento no es lento ni uniforme, y como consecuencia se generan canales de flujo de distinta temperatura. Las correintes más calientes y menos densas viajan por la parte superior del tubo, que se dilata considerablemente más que la parte inferior. Así es como la tubería se dobla sobre sí misma (como una banana, de allí su nombre) generando tensiones que deben ser consideradas en el cálculo.